La Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU) votó mayoritariamente a favor de la integración plena de Palestina al organismo, un trámite que debe completarse en el Consejo de Seguridad, donde el pasado 18 de abril se frustró.
No obstante, tan caldeada la situación entre Israel y Hamas, la previa a la votación dejó como registro el papel desempeñado por Gilad Erdan, embajador israelí en ONU, quien trituró la carta fundacional del organismo en repudio a que se le diera membresía plena a Palestina.
Según Erdan, su duro gesto fue en rechazo a que Palestina sea miembro pleno de ONU, ya que otorgarle la condición de Estado significaría que Yahya Sinwar, el jefe de Hamas, pasaría a tener “todos los privilegios como futuro jefe de Estado”.
Después del discurso del embajador de Israel, la Asamblea General apoyó en mayoría las aspiraciones de autonomía de Palestina al resolver la entrega de nuevos “derechos y facultades” al país, y pidió al Consejo de Seguridad que “reconsidere favorablemente su solicitud de convertirse en el miembro número 194 de Naciones Unidas”, en una decisión no vinculante aunque simbólica.
Desde la administración de Joe Biden, de peso en el Consejo de Seguridad, adelantaron que no avalarán la resolución y será nuevamente vetada, tal como sucediera el pasado 18 de abril.
En total, 143 de los 193 miembros de la ONU votaron a favor de la resolución. Solo nueve países votaron en contra, entre ellos la Argentina. Hubo 25 abstenciones
Desde Tel Aviv, el canciller del gobierno de Benjamin Netanyahu, Israel Katz, dijo que la votación de la Asamblea General era una “decisión absurda”.
La decisión “recompensa a los asesinos y a los violadores de Hamas y menoscaba los esfuerzos para liberar a los rehenes” en manos del movimiento islamista palestino desde el 7 de octubre, escribió Katz en la red social X. “El mensaje que envía la ONU a una región llena de dolor es que la violencia es rentable”, agregó.
Katz agradeció por otra parte “a todos los países que no votaron a favor y cooperaron con esta medida enrevesada, eligiendo colocarse en la parte justa de la historia y de la moralidad”.
Además de Israel, votaron en contra de la resolución de la ONU Argentina, Estados Unidos, República Checa, Hungría, Micronesia, Nauru, Palau y Papúa Nueva Guinea.
La Autoridad Palestina, desde Ramala, aseguró que el resultado demuestra que Palestina “merece ser miembro pleno” de Naciones Unidas.