En una noche fría, pero en un José Fierro caliente, Atlético Tucumán dio un golpe de autoridad al vencer 4-2 a Huracán, en un duelo que revitalizó las aspiraciones del Decano de alcanzar un lugar en las competencias internacionales. Además, el traspié de la visita benefició a Vélez, que, con un partido menos, consolidó su posición en la cima del campeonato. Así, con todos estos factores, el equipo de Facundo Sava pudo marcar el punto de inflexión tan esperado tras varias actuaciones irregulares. Sí, el local mostró su mejor versión: un equipo sólido y efectivo, especialmente en un primer tiempo donde impuso condiciones casi sin dejar margen de reacción a un rival que llegaba a este partido con una racha invicta de ocho fechas.