Según el periódico británico The Guardian, en horas de la mañana del martes, altos funcionarios estadounidenses y ucranianos confirmaron que se han disparado misiles ATACMS de fabricación estadounidense hacia territorio ruso por primera vez durante la guerra de Ucrania. No precisaron cantidad, objetivos ni resultados del ataque.
A su vez, fuentes rusas, confirmaron estos disparos en lo que sin duda resulta una escalada en el conflicto.
El ataque se produjo dos días después de que la administración de Joe Biden autorizará su uso, y en el día 1.000 de la guerra desde que se lanzaron las invasiones a gran escala de Rusia.
El Ministerio de Defensa de Rusia afirmó haber derribado cinco de los seis misiles disparados contra Bryansk, en un ataque que tuvo lugar a las 3.20 am hora de Moscú (21.20 de ayer en Argentina).
Rusia anunció este martes, luego del ataque, que había reducido su umbral de lo que potencialmente podría desencadenar el uso de sus armas nucleares, incluyendo considerarlo un ataque conjunto si consistiera en “una agresión de cualquier estado no nuclear, pero con la participación o el apoyo de un país nuclear”.
El anuncio tiene nombre y apellido: es una respuesta al ataque con los nuevos misiles de largo alcance al territorio ruso.
Cambio de Doctrina
Según el portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, los cambios en la doctrina nuclear rusa ya están “prácticamente formulados” y serán formalizados en caso de que sea necesario, según declaraciones recogidas por la agencia estatal TASS.
“Era necesario alinear nuestros principios con la situación actual”, afirmó Peskov tras la firma del decreto.
La doctrina, publicada en el portal de información legal del Estado ruso, amplía la categoría de alianzas militares contra las que Rusia aplicará la estrategia de disuasión nuclear.
“La agresión de cualquier Estado perteneciente a una coalición militar (bloque, alianza) contra la Federación de Rusia y (o) sus aliados es vista como una agresión de la coalición en su conjunto,” señala.
Rusia puede recurrir a las armas nucleares también en caso de “ataque masivo” con aviones de guerra, misiles de crucero, hipersónicos, drones y otros aparatos no tripulados que violen el espacio aéreo del país.
Por primera vez, el documento alude no sólo a la aviación y a aparatos hipersónicos enemigos, sino también a drones, un instrumento de guerra que ha adquirido una gran popularidad en los últimos años.
Al mismo tiempo, la doctrina subraya que Rusia ve las armas nucleares como “un instrumento de disuasión” de carácter defensivo, cuyo empleo es una “medida extrema y forzosa”.
El canciller Lavrov dijo que nada en la doctrina nuclear actualizada publicada por Rusia hoy es diferente a los documentos doctrinales de Estados Unidos, que también incluyen términos amplios como permitir el uso de armas nucleares por parte de Estados Unidos para “detener fuerzas enemigas convencionales potencialmente abrumadoras”, asegurar el éxito de una operación o poner fin a una guerra en términos favorables a Estados Unidos.
La Casa Blanca anunció este martes que “no ve necesidad de responder al cambio en la doctrina nuclear rusa”. El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca dijo que Washington no está sorprendido por el anuncio ruso de una doctrina nuclear actualizada.
Hablando en Río de Janeiro, el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia dijo que el uso de misiles ATAC de fabricación estadounidense en un ataque ucraniano a Bryansk era "una señal" de que Occidente quiere intensificar el conflicto.
Según Tass, dijo: “Sin los estadounidenses, es imposible utilizar estos misiles de alta tecnología. Putin ha hablado de ello varias veces”.