La no asistencia de Argentina de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático de 2024 COP 29, preocupa a la comunidad científica.
Sandra Díaz, investigadora del Instituto Multidisciplinario de Biología Vegetal de la UNC destacó que el cambio climático es una amenaza urgente y esta decisión nos coloca ante un notable “aislamiento y negacionismo”.
Hoy cabe plantearse si realmente se toma dimensión de lo que pasa o lo que puede pasar en nuestro país respecto del posicionamiento que el Gobierno que encabeza Javiel Milei viene adoptando ante estas convocatorias internacionales.
Tanto en la Cumbre del G20 de Brasil como en la Cumbre Climática COP29 de Bakú, Capital de Azerbaiyán, donde Argentina ha sido invitada, por un lado firmando documentos con alguna declaración a favor, por ejemplo, de la lucha contra la pobreza y declarando lo contrario en sus discursos, y por otro lado respecto del cambio climático y otras declaraciones en contra, ya desde hace semanas el Gobierno argentino viene dando muestras de aislarse del mundo en función de la lucha por la defensa del medio ambiente.
Aislamiento y negacionismo
Por estas horas se desarrolla la Conferencia de Naciones Unidas sobre el cambio climático 2024 COP 29, donde llama la atención la no concurrencia de Argentina, porque mientras que el mundo va hacia un lugar que es cuidar el medio ambiente, nuestro país toma un rumbo en contrario.
Si bien la ciencia argentina está y seguirá trabajando por el bien común, la Investigadora Superior CONICET, Profesora titular de Ecología de comunidades y Ecosistemas, Dpto. de Diversidad Biológica y Ecología, FCEFyN, UNC dialogó con DATA UNIVERSITARIA de Canal 10 y señaló que “bueno evidentemente que Argentina se retire de la COP29 es un gran retroceso por el lado que se lo mire, quedamos totalmente afuera. Como se sabe el cambio climático y la crisis de la naturaleza son de los desafíos ambientales más serios que hoy enfrenta la humanidad, toda la evidencia científica es prácticamente unánime y además cualquiera puede apreciar alrededor nuestro que el cambio climático ya está entre nosotros, por ejemplo la frecuencia y la intensidad de eventos extremos como olas de calor, como lluvias de gran intensidad, huracanes, incendios de gran escala. No es que nunca hubieran existido, pero su intensidad y su probabilidad han aumentado mucho, muchísimo, en los últimos años, como consecuencia del cambio climático y eso ya se ha traducido, no solamente en estadísticas frías sino que ya ha costado en todo el mundo millones de vidas humanas que no se no se tendrían que haber perdido.”
Respecto de lo que sucede con el clima a nivel mundial, la Dra. Sandra Díaz remarcó que todo esto “si se hubiera evitado el cambio climático que ya está en marcha”, no tendríamos que estar lamentando estas consecuencias, por lo que le preguntamos si esto es un negacionismo difícil de explicar, cuando todo el mundo va para un lado, Argentina va para el otro, que consecuencias podría acarrearle a nuestro país tal posicionamiento, a lo que nos contestó que “es muy importante que entendamos que este no es un problema que si nos vamos y damos un portazo, no nos vaya a tocar. Es un problema mundial que afecta a todos los países, pero afecta mucho más a los países menos ricos y dentro de cada país, a las poblaciones más vulnerables, los que viven en zonas marginales, los pobres, la gente anciana, la infancia, las mujeres y precisamente todos los sectores que menos responsabilidad o menos culpa, tienen en este cambio climático que nos afecta.”
Nos quedamos sin ayuda internacional
La científica argentina explicó además que “lo que se está tratando hoy en la Cumbre de Bakú, uno de los tópicos más calientes que es el de las responsabilidades comunes pero diferenciadas, o sea, todos los países tienen que hacer el esfuerzo y poner su parte pero los países más ricos y más responsables de lo que está pasando deben aportar recursos concretos, recursos financieros a los menos ricos, para que puedan enfrentar mejor el futuro.”
Argentina forma parte del segundo grupo, los países menos ricos o si se quiere emergentes, por lo que cualquier cosa que nos pase en el futuro no vamos a recibir ningún tipo de ayuda y consideración de aquellos que firmaron los acuerdos de los que no lo están haciendo como la Argentina, ante lo que Díaz remarcó que “lo importante es que no sé si todo el mundo tiene claro es que Argentina viene teniendo por décadas una participación científica muy importante y una política nacional muy clara respecto al cambio climático, una política que se mantuvo durante tres décadas independientemente de los gobiernos de distintos partidos políticos. Tenemos leyes vigentes como la 27.520 por ejemplo, que de alguna manera nos obligan a tomar acciones con respecto al cambio climático global, por lo que esta salida, me permito llamar intempestiva y extemporánea de la Cumbre del clima, no solamente y de alguna manera nos pone fuera de la ley sino que además es algo donde tenemos todo para perder y nada para ganar, porque nos aísla totalmente del contexto internacional, no impide para nada en que experimentemos todas las consecuencias negativas del cambio climático y a la vez nos priva del acceso a recursos financieros que nos ayudarían a enfrentar ese cambio climático, porque nos excluiría de este apoyo internacional que se está negociando en la Cumbre para que los países de los menores recursos recibamos esa dinero nuevo para las políticas de mitigación y de adaptación”, sentenció.
Hoy estamos transitando por un errático sendero de ambigüedades en materia de política interior y exterior en Argentina, mientras las decisiones políticas hablan por un lado de que hay que cuidar los recursos del Estado, que la caja del Estado es lo más importante en este momento, por otro lado podría llegar dinero del exterior para estas cosas y sin embargo no van a llegar esos fondos debido al posicionamiento de nuestro país en estos temas, respecto de lo que la científica de la UNC y el CONICET expresó que “por eso es que desde la comunidad científica estamos instando al gobierno nacional para que reconsidere esa posición”, al tiempo que agregó y destacó que “hay casos positivos, destacar las iniciativas subnacionales en este contexto donde el país como Nación se acaba de retirar de las negociaciones, hay una serie de iniciativas subnacionales, iniciativas a nivel de las provincias y a nivel de municipalidades, por ejemplo, que se han comprometido con la lucha contra el cambio climático y quiero aprovechar esta instancia para instar a que se mantengan y a que se multipliquen y profundicen esos esfuerzos.”