En la sexta luna del Festival Nacional de Folklore Cosquín, Luciana Jury nos compartió sus canciones con la necesaria cadencia y el estilo puro de las tradiciones.
La cantante bonaerense, que además es guitarrista y compositora argentina de música de raíz folklórica, provienen de una familia de artistas, es hija de Jorge Zuhair Jury y sobrina de Leonardo Favio.
Su canto y su repertorio exceden las fronteras del folclore, en tanto lleva la música de raíz a los extremos de la intensidad y el desgarro, elevando las sonoridades al universo de lo impredecible.
Desde pequeña demostró el apego por la música folklórica argentina y latinoamericana y como creció en la frontera donde termina la ciudad y comienza el campo, pudo absorber ese universo suburbano donde conviven el tango, la cumbia, el rock y la música folklórica. Su música y su estilo son un reflejo de este paisaje.
Luciana Jury se involucra en la música latinoamericana, aunque sin dudas es una artista multifacética que se atreve a poner su sello propio en cualquier estilo musical.
Caracterizada por una interpretación intensa y profunda, aborda canciones anónimas de tradición oral, de autores y compositores contemporáneos además de sus propias composiciones.
Con su música recorrió la argentina y realizó diversas giras y conciertos por Chile, Uruguay, Brasil, Bélgica, Alemania, España, Suecia, Austria y Dinamarca.
En el 2017, obtuvo la Mención Especial en el Festival Nacional de Cosquín, en el 2020 “Abrazo”, su cuarto disco solista fue galardonado en los Premios Carlos Gardel por la categoría Mejor Álbum Artista De Folclore (entregado en 2021) y en 2023 A dúo con Milagros Caliva graba el álbum “Material Urgente” y estrena su chacarera "Las ramas", grabada junto a Lito Vitale, entre algunos eventos destacados de su trayectoria.
En este Cosquín de Platino, Luciana Jury se presentó con su guitarra, un mate, una pava y una mesa de rancho como decorado, emulando ese paisaje campero que tr ansmite su música y en su mensaje el primero de sus temas: “Soy la tierra” de Horacio Banegas, canción que le valió la consagración al santiagueño allá por los 90.
Entre malambos, milongas, huellas y esas canciones que calan en lo profundo de esas letras cargadas de lo costumbrista, se derramó el repertorio de Jury ante una multitud que escuchaba, guardando un respetuoso silencio.
Las canciones que trajo esta artista que vimos y disfrutamos por Canal 10 y la TV Pública, fueron descriptas como “grandes, y cuando son profundas, pasan a ser del pueblo definitivamente, no tienen tiempo”, dijo Luciana Jury para seguir desarrollando su repertorio en el gran festival.
Promediando su actuación Jury cantó también temas de autores anónimos, recopilaciones de Leda Valladares con “El paisanito” y tantos otros.
“Vivan los pueblos, viva su cultura, viva la música anónima…!”, sentenció la cantora desde el gran escenario y ante los oídos atentos de toda la plaza.