Argentina, entre los países donde menos crédito se le destina al sector productivo
Si bien algunos datos de la “macro” dan cuenta de que la economía en Argentina estaría en proceso de estabilización, hay indicadores alarmantes. Incluso cuando se los analiza en términos históricos, ya que al elaborar una línea de tiempo se puede vislumbrar que hay problemas que son de raíz y que poco tienen que ver con el color político de turno.
Por ejemplo, Argentina es el país de Latinoamérica que menos créditos le entrega al sector privado productivo en relación a su Producto Bruto Interno (PBI). Así lo clarifica el último informe elaborado por el Departamento de Economía de la Bolsa de Cereales de Córdoba (BCCBA), en donde se detalla que durante 2024 la relación préstamos al sector privados/PBI fue de apenas el 9,5%, mientras que países como Estados Unidos, Suiza, Japón y China le destinan a su matriz productiva créditos por cerca del 175% de sus respectivos PBI.
Si la meta no fuera compararse con naciones del primer mundo sino más bien con nuestros vecinos, el promedio entre los demás miembros de América del Sur trepa el 52%, cifra que quintuplica los préstamos privados utilizados en Argentina para la producción en cualquiera de sus formas y etapas.
“Un sistema financiero sano permite canalizar los ahorros hacia préstamos que generan crecimiento en el sector productivo y la actividad comercial, potenciando la economía”, sostiene el informe de la BCCBA. Todo lo contrario ocurre en Argentina, donde las personas físicas en relación de dependencia son las principales receptoras de los créditos bancarios con el 28% de participación sobre el total. Apenas por delante de servicios que se lleva el 26% y muy por encima de la industria manufacturera (17%) y la actividad primaria (11%). Más atrás se ubican el comercio (9%), la construcción (3%) y electricidad, gas y agua (2%).
Ese detalle deja en evidencia que en Argentina el principal destino de los créditos privados se entrega directamente al consumo y no para actividades productivas que luego potencien el crecimiento de la economía.
Consumo
En nuestro país, los bancos históricamente han preferido prestarle al Estado en lugar del sector privado, por aquello de que consiguen una “tasa libre de riesgos”. La tendencia en los últimos meses ha variado luego de que la administración libertaria consiguiera el superávit fiscal a partir de la famosa “motosierra”, razón por la cual los bancos se han visto obligados a aumentar la cantidad de préstamos al sector privado, principalmente a personas físicas.
Como se dijo, durante 2024 los préstamos al sector privado en Argentina fueron en promedio del 9% de su PBI. Antes de eso hubo picos del 12,3% entre agosto y septiembre de 2013 y un mínimo histórico del 4% en abril de 2024. De cualquier modo, todos esos coeficientes están lejísimos del 52% de promedio que manejan los demás países de América Latina.
Córdoba y el agro
El informe de la Bolsa de Cereales de Córdoba (BCCBA) da cuenta de que durante 2024 se movilizaron $1.450 mil millones en Córdoba en concepto de producción primaria, actividad que representa el 26% del dinero concedido como préstamo dentro de la provincia.
De ese total, el 82,5% tuvo como destino los cultivos y servicios agrícolas donde la mayor participación la tuvieron los cereales, oleaginosas y forrajeras.
En lo concerniente a todo el país, durante el año pasado se movilizaron $10.791 miles de millones entre el sector de agricultura, ganadería, caza y silvicultura y el sector de elaboración de productos alimenticios y bebidas, que significó el 16% del dinero prestado a nivel nacional.
Córdoba representó el 17% de los préstamos que se destinaron a la agroindustria, posicionándose como la tercera provincia en orden de importancia. El 26% de los préstamos otorgados por los bancos en Córdoba son destinados al sector agropecuario.