El fin de semana en Ímola dejó varias lecciones y datos clave que marcan la pauta para lo que podría esperarse en las estrechas calles del Principado.
Mónaco: historia, desafío y estrategia cambiante
Mónaco es un circuito que genera controversia para muchos debido a la dificultad para adelantar. Sin embargo, su rica historia y el prestigio que otorga ganar allí lo mantienen como una cita espectacular. Es un trazado muy angosto donde no hay margen de error; cualquier equivocación suele terminar en accidente. Por ello, la clasificación del sábado es fundamental, ya que el resultado de la carrera se define en gran medida ese día.
Para intentar mejorar el espectáculo y combatir la tendencia a ver un "trencito" de autos sin sobrepasos, la FIA ha impuesto una nueva reglamentación para este año en Mónaco: dos paradas en boxes obligatorias. Esto fuerza a los equipos a pensar mejor sus estrategias y podría añadir un elemento de imprevisibilidad, trasladando parte del "espectáculo" del manejo en pista a la inteligencia en la estrategia.
Otro factor constante en Mónaco es la alta probabilidad de Safety Car (virtual o físico) debido a la proximidad de los muros y la dificultad para retirar autos accidentados. Esto influye directamente en las decisiones de estrategia, llevando a muchos equipos a considerar realizar un long run inicial (dar muchas vueltas antes de la primera parada) a la espera de una interrupción. La lluvia también podría aparecer (se menciona la posibilidad para la clasificación del sábado), lo que cambiaría drásticamente el reglamento y las estrategias de neumáticos.
Las lecciones de Ímola para Colapinto
El debut de Franco Colapinto con el Alpine en Ímola fue complejo. Aunque mostró destellos, como una vuelta rápida en 1:23.45 que fue comparable a la de Pierre Gasly en ese momento (aunque hecha más tarde en la carrera, demostrando adaptación), su ritmo promedio de carrera fue más lento que el de su compañero de equipo. El ritmo promedio de Gasly fue de 1:21.686, mientras que el de Franco fue de 1:22.035, una diferencia de aproximadamente 0.35 segundos.
La carrera de Ímola estuvo muy influenciada por la suerte y la estrategia, especialmente con la aparición de los Virtual Safety Cars. Franco se vio perjudicado por el momento del primer VSC, ya que había parado en boxes cinco o seis vueltas antes, lo que complicó su estrategia planificada. Además, un factor que afectó su ritmo fue el alto porcentaje de tráfico que enfrentó durante la carrera, registrando un 82.4% de tiempo con autos por delante.
Es importante considerar que en Ímola, Franco estaba aprendiendo el auto y, según se observó en las cámaras onboard, también estaba cuidándolo para no romperlo, especialmente al inicio. Él mismo reconoció que su primera carrera fue "difícil" y que "todavía no estaba del todo ahí" ("I'm not quite there yet").
Desafíos adicionales en Mónaco
Para Mónaco, Franco enfrenta varios factores a tener en cuenta:
- Es un circuito intrínsecamente difícil.
- El auto Alpine no se ha mostrado tan dócil y parece necesitar desarrollo.
- Tiene un ingeniero de pista nuevo, con poca experiencia ("0 km", "más verde que Franco"), lo que representa un desafío para la comunicación y la adaptación en un circuito tan exigente.
- Se suma la posible lluvia y la nueva regla de las dos paradas obligatorias.
A pesar del incidente en la clasificación de Ímola, donde chocó, el equipo Alpine no le atribuyó la culpa a Franco; hubo comprensión. Flavio Briatore, quien fue clave en su llegada al equipo, le había pedido explícitamente que "no choque", pero ratificó su confianza en el piloto argentino tras el incidente. Briatore es visto como un gran respaldo para Franco dentro del equipo.
Colapinto ya conoce el trazado de Mónaco por sus participaciones en categorías inferiores y ha estado trabajando en el simulador de Alpine para prepararse, mostrando las dificultades del circuito, incluso tocando las protecciones durante una vuelta simulada.
Contexto amplio y expectativas
El panorama actual de la Fórmula 1 muestra a Max Verstappen y McLaren con un ritmo muy fuerte, pero también destaca el excelente rendimiento de Alex Albon con Williams, quien está superando las expectativas y a pilotos como Carlos Sainz. Otros jóvenes talentos como Hajar y Bortoleto también están mostrando buen ritmo en carrera.
En el caso de Colapinto, existe una gran presión sobre él, que algunos comparan con la que no tuvo Jack Doohan previamente. Se menciona que si no fuera argentino, su situación quizás pasaría más desapercibida.
De cara a Mónaco, el objetivo principal para Franco será mantener el auto en pista y evitar incidentes. Lograr un buen resultado en clasificación es clave para aspirar a sumar puntos. Una clasificación en Q3 sería considerada una "locura total" y un gran logro. La experiencia previa en Mónaco y el trabajo en el simulador son puntos a favor, pero la combinación del difícil circuito, un auto que necesita desarrollo y un ingeniero novel añaden una capa de complejidad al desafío. El fin de semana en Mónaco será una prueba importante para seguir evaluando su adaptación y crecimiento en la categoría.