Un grupo de 260 mineros se encuentra bajo tierra en una mina de oro desde el jueves. El incidente ocurrió en el norte de Sudáfrica, cerca de Johannesburgo, tras un accidente en uno de los pozos de la mina que la cual es dueña la empresa Sibanye Stillwater.
Desde la firma confirmaron que el episodio provocó daños en el nivel 35 del pozo y que, como medida de precaución, los trabajadores todavía se encuentran en una estación subterránea esperando para ascender. Según confirmaron fuentes internacionales, todos los empleados afectados fueron localizados y se encuentran a salvo.
La empresa indicó que se les ha provisto de alimentos y que los procedimientos de seguridad y evaluación estructural están en marcha para proceder con el rescate de forma ordenada y segura. "Estamos implementando activamente nuestros procedimientos de seguridad y de inspección del pozo. Una vez completados, comenzaremos a sacar a los empleados a la superficie", señaló la empresa.
Asimismo, explicó que se decidió mantener a los mineros en el lugar para evitar riesgos adicionales, como desplazamientos prolongados por galerías que podrían estar comprometidas. El accidente ocurrió alrededor de las 22:00 horas del jueves según confirmó Livhuwani Mammburu, portavoz del Sindicato Nacional de Mineros (NUM).
Aunque la compañía asegura que los trabajadores han recibido alimentos, el sindicato expresó preocupación por la falta de confirmación sobre el acceso a agua potable y condiciones adecuadas de salud en la estación subterránea. Cabe recordar que en enero pasado, en la mina de Buffelsfontein, fueron hallados 78 cuerpos de mineros ilegales tras meses bajo tierra.
La operación derivó en el rescate de otros 246 'zama-zamas', el nombre que reciben los mineros informales en lengua zulú, muchos de los cuales estaban retenidos por mafias o temían ser arrestados.
Sudáfrica, uno de los mayores productores de oro del mundo, arrastra un largo historial de accidentes mineros, especialmente en explotaciones antiguas o abandonadas, donde los controles de seguridad no son tan estrictos.
Con información de EFE.