Noche de gloria y emoción en Múnich: el PSG, campeón de Europa, homenajea a Xana, hija de Luis Enrique
El Paris Saint-Germain (PSG) hizo historia al conquistar su primera UEFA Champions League. En una final contundente disputada en el Allianz Arena, el equipo francés se impuso por un marcador de 5-0 frente al Inter. Esta victoria no solo significó el primer título de Campeón de Europa para el club parisino, sino que también consolidó el primer triplete en la historia del fútbol francés.
Sin embargo, más allá del logro deportivo, la noche estuvo marcada por un momento de profunda emoción y humanidad. Tras el silbato final, mientras el equipo y la hinchada celebraban, un gesto conmovedor captó la atención de todo el estadio. Los hinchas del PSG desplegaron un mosaico gigante con la imagen de Xana, la hija del entrenador Luis Enrique.
Xana falleció en 2019 a la edad de 9 años. El homenaje consistió en un dibujo animado que mostraba a Xana junto a su padre, Luis Enrique, clavando una bandera del PSG en el césped del Allianz Arena. Este dibujo replicaba una recordada fotografía de 2015, donde la niña aparecía haciendo lo mismo con una bandera del Barcelona tras la final de la Champions League ganada por el club catalán en Berlín.
Este tributo fue descrito como conmovedor y recibió aplausos de todo el estadio. El propio club parisino se sumó al homenaje, publicando la imagen en sus redes sociales acompañada del mensaje: “Xana siempre presente”.
El gesto de la hinchada tuvo un significado especial, especialmente después de que Luis Enrique hubiera compartido públicamente sus sentimientos semanas antes de la final: “No estará mi hija físicamente, pero estará espiritualmente. Y eso, para mí, es muy importante”. La hinchada, con esta bandera, cumplió ese deseo, regalándole al entrenador un gesto de amor y respeto inolvidable.
De esta manera, Luis Enrique cerró una noche calificada como perfecta. Conquistó el título más importante de Europa para el PSG, logró un hito para el fútbol francés, y recibió un homenaje "celestial" para su hija, haciendo de esta "la Champions más especial, con Xana en el corazón". Además del mosaico, Luis Enrique también utilizó una remera con un dibujo de su hija en la final.