Tras dejar la administración que conduce Donald Trump, el multimillonario y magnate tecnológico, Elon Musk, quien era asesor del Departamento de Eficiencia Gubernamental, criticó severamente el proyecto de presupuesto de la Casa Blanca.
“Lo siento, pero ya no lo soporto”, afirmó en la red X, agregando calificativos como “enorme, escandaloso y desmesurado proyecto de ley de gastos del Congreso es una abominación repugnante”.
El dueño de Tesla aseveró que era “una vergüenza para quienes votaron a favor, saben que hicieron mal”, cuestiona al Senado, tras la ajustada aprobación en la Cámara de Representantes.
Musk fue el conductor del organismo que llevó adelante ajustes pronunciados dentro de la administración hasta la semana pasada, cuando prometió seguir siendo “amigo y asesor” del presidente Trump, aunque afuera del gobierno de Washington.
El proyecto de ley, calificado de “grande y hermoso” el por jefe de Estado estadounidense incluye un alivio fiscal significativo e impuestos a las remesas, por temor a que aumente la deuda de Estados Unidos en función de la posible variación de la balanza comercial.
Los opositores aseguran que los recortes privarán de cobertura sanitaria a millones de ciudadanos estadounidenses con bajos ingresos.
Aplicará impuesto a las remesas del 3,5% a unos 40 millones de habitantes, entre titulares de tarjetas de residencia, trabajadores temporales y migrantes en situación irregular.
La Casa Blanca estima por el contrario que el proyecto de ley estimulará el crecimiento económico.
El Senado quiere que el proyecto de ley llegue al escritorio de Trump antes del 4 de julio, Día de la independencia de Estados Unidos, un plazo ambicioso dada la estrecha mayoría de tres votos de los republicanos y las fisuras abiertas.