Enzo Barrenechea, la historia del cordobés que podría debutar en la Selección
Para Enzo Alan Tomás Barrenechea la vida ha tenido, pese a su juventud, muchas vueltas. Como todo joven que logra tener una oportunidad en el fútbol profesional.
Nacido en Villa María, quienes lo vieron jugando “en el baby” no dudan que tenía condiciones “de crack”. Estando en el club Sarmiento, de niño su madre se mudó a Córdoba capital tras la detención del padre de Enzo, quedando alojado en la cárcel de Bouwer.
Por haberlo visto jugar, en algún momento de los ocho años que estuvo preso la Universidad Nacional de Villa María se acercó a la familia para convocarlos a que juegue en Universitario, el club que es propiedad de la casa de altos estudios.
“La de Enzo es una historia de superación, era un gran compañero y muy buen estudiante secundario. Por eso la Universidad decidió brindarle ayuda a la madre (para alquilar una vivienda y ofreciéndole empleo) y mediar para conseguir el traslado del padre a la cárcel de Villa María. Jugó un tiempo hasta que no lo pudimos retener”, sentencia Luis Negretti, el actual rector.
El propio Barrenechea contó que los captadores de la entidad rosarina lo vieron “en el Mundialito de Embalse” y la Universidad más allá de la venta se quedó “con el 10% de una futura transferencia”.
Cuando ese dinero ingresó, con el paso del futbolista a Juventus, en Villa María pudieron terminar las obras para poder ofrecer la carrera de Medicina.
En su trayectoria europea, pasó de lesionarse en el club italiano a debutar en Primera (enfrentando incluso al PSG de Lionel Messi por Champions); y después terminar siendo vendido al Aston Villa.
La última temporada la jugó a préstamo en el Valencia, que mantuvo a duras penas la categoría en LaLiga española.
Convocado por primera vez en noviembre de 2024, ahora se le abre otra vez la chance del debut. Fundamentalmente en el juego ante Chile de este jueves, debido a la gran cantidad de bajas entre los volantes argentinos.