En pleno Alta Córdoba, desarticularon una fiesta clandestina con 300 personas.
Es una imagen repetida: los fines de semana se reiteran los partes policiales o de autoridades municipales o del Ministerio de Seguridad advirtiendo sobre la desarticulación de una fiesta clandestina o de eventos sin autorización.
Lo habitual en estos casos, es que tales situaciones se produzcan en la periferia de la ciudad, en puntos alejados del centro y del tráfico, o directamente, en localidades aledañas.
Por eso sorprendió el epsidosdio en horas de la madrugada del sábado cuando efectivos policiales en colaboración con personal de la Dirección de Espectáculos Públicos de Fiscalización y Control de la Municipalidad de Córdoba llegaron a un local comercial ubicado en calle Luis de Góngora al 1000 de barrio Alta Córdoba.
Allí, luego de solicitar la documentación del caso y realizar las inspecciones de rigor, procedieron a clausurar y desalojar una fiesta donde había, aproximadamente, 300 personas. Es que el lugar no contaba con habilitación ni medidas de seguridad para estos tipos de eventos bailables.
En el procedimiento también se identificó al propietario del lugar, a quien se le labró el acta correspondiente.