Denuncian desamparo judicial por la muerte de una mujer en Córdoba
El pasado 12 de junio Romina Salas, una joven cordobesa de 36 años, fue encontrada sin vida. A pesar de que su muerte fue caratulada como de etiología dudosa y continua bajo investigación, su familia tiene una certeza. Para ellos Romina se quitó la vida agobiada por el desamparo y la burocracia judicial.
Según la familia, Romina denunció, en múltiples oportunidades, a su ex pareja que ejercía sobre ella distintas formas de violencia de género (abusos sexuales, privaciones ilegítimas de la libertad, hostigamiento psicológico, patrimonial y digital).
El programa Fuerte y Claro, por SRT Media, entrevistó a Graciela Taranto, la abogada que representa a la familia.
“Estamos hablando de una revictimización sobre violencia de género que termina en un desenlace fatal”, remarcó Taranto y confirmó que si bien todavía no cuentan con los resultados oficiales de la autopsia, es la hipótesis que maneja la familia.
El caso de Romina Salas
Romina estaba casada y además de convivir con su ex pareja, ambos eran socios y compartían la gerencia de un negocio (emprendimiento de instrumentos musicales). A lo largo del vínculo, según afirma la abogada, la ex pareja de Romina comenzó a ejercer contra ella un sinfín de violencias que cada vez era mas frecuente.
Violencia física, psicológica pero también económica. Luego de un tiempo, Romina efectivamente logró separarse de su pareja y quedó prácticamente en la calle. La abogada de la familia contó que tras la separación Romina “quedó sin bienes, sin nada”.
Tras meses de asesoramiento y recolección de pruebas, Romina finalmente denunció a su ex pareja entre agosto y septiembre del 2024. Pero la denuncia quedó allí y nunca se avanzó demasiado en la instrucción del caso.
“El no ser escuchada, el no dar respuesta, eso termina causando un daño muy profundo que desestabiliza a la víctima”, señaló Taranto.
Para la familia, el reclamo es uno solo. “Que descubra que llevó a que Romina haya tomado una determinación tan terrible y tan violenta para consigo misma después de tres años de haber sido víctima de violencia”, remarcó la abogada.
Según Taranto, el desamparo judicial sigue y se mantiene porque el agresor nunca se sometió a la justicia y se fue del país. El desamparo judicial sigue porque esta persona aun conserva los bienes conyugales de los cuales sigue sacando rédito económico y así perpetua el vaciamiento del patrimonio de Romina.
“La impunidad absoluta”, sentenció la abogada de la familia de Romina.
La burocracia judicial
La abogada sostuvo que la denuncia fue formulada en agosto del 2024 luego de un arduo trabajo de recolección de pruebas aportadas por la víctima. No obstante, los meses pasaron y no hubo avances claros en la instrucción por parte de la fiscalía.
Esta inacción, sostiene la familia, es la que generó en Romina el sentimiento de abandono y desamparo que la llevó a quitarse la vida.
Hoy la Fiscalía 3 de Violencia Familiar tiene a su cargo la investigación por la denuncia de violencia sexual y física. Por otra parte, es la Fiscalía del distrito 4 turno 4 la que investiga la presunta violencia económica; y ahora se suma la Fiscalía del distrito 3 turno 3 que investiga la muerte calificada como de etiología dudosa.
Para la abogada y la familia, lo de Romina no fue “un caso aislado” sino que es consecuencia de un “sistema judicial que no escucha”.
“Es una muestra más de la deuda estructural en materia de violencia de género: la falta de perspectiva en los procedimientos judiciales, la impunidad de los agresores, la desprotección ante las denuncias, y la ausencia de acompañamiento real y sostenido", apuntó Taranto en un comunicado difundido en las últimas horas.
Con el caso de Romina Salas ya serían 8 los femicidios en Córdoba en lo que va del 2025.
Si sos víctima de violencia de género o conocés a alguien que necesite ayuda:
*Línea nacional y gratuita 144, disponible las 24 horas del día durante todo el año
*Mensaje con la palabra “hola” a la línea directa +54 9 11 2771-6463 de WhatsApp a nivel nacional