Traslado o tala: asambleístas que defienden el quebracho denuncian «extorsión»
En la tarde del miércoles 9 de julio, volvió a desplegarse un operativo para lograr remover y trasladar el longevo quebracho apostado a la vera de la avenida Padre Luchesse, en Villa Allende, sin embargo una gran raíz sería ahora el impedimento para concretar la tarea.
Felipe Crespo, informó que la grúa contratada para el trasplante del árbol, que tiene un peso estimado de 30 toneladas, no logró levantarlo debido a problemas con las raíces.
“Nos quedan dos alternativas, o conseguimos otra grúa para mañana o días próximos, o a este árbol, lamentablemente, vamos a tener que talarlo”, para lograr ampliar la traza, agregó el funcionario.
VER: Amplían el perímetro del Quebracho Blanco en la avenida Padre Lucchesse
La denuncia de los asambleístas
Desde hace 28 días, asambleístas y vecinos se apostan en la zona para defender el árbol de casi 300 años que, avalados por especialistas, argumentan que la remoción y traslado compromete la vida del quebracho; apenas un 20% de probabilidad de sobrevida es lo que estiman los especialistas más optimistas.
Además, los defensores insisten en que no es una ruta sino una avenida por lo cual se debe circular con una velocidad máxima de 60 kilómetros por hora, lo que permitiría modificar la traza determinada algunos metros y esquivar la planta. Sin embargo, desde Caminos de las Sierras informaron que “no es viable”.
En la medianoche del miércoles, los asambleístas recibieron un comunicado que los insta a que se manifiesten a favor de la reubicación, a unos 25 metros de su ubicación actual, caso contrario, la Municipalidad de Villa Allende procederá a la tala o remoción de la especie.
El comunicado de Jorba
Por su parte, la empresa de grúas contratada para remover y lograr trasladar el árbol se retiró del lugar, el miércoles por la tarde, cancelando la prestación del servicio. Luego, emitieron un comunicado fundamentando las razones de su retiro.
“Una de nuestras grúas fue inicialmente contratada para tareas generales de izaje, pero una vez tomada conocimiento del verdadero objetivo de su uso, se canceló la prestación del servicio de inmediato y se retiró la maquinaria del lugar”, indicaron.
Debe entenderse que la empresa aceptaba movilizar el árbol siempre que éste estuviese ya removido, pero la realidad, es que el izaje del ejemplar no podía realizarse porque todavía se aferra al suelo con una enorme y resistente raíz pivotante. De este modo, antes de izar y trasladar el quebracho, la empresa debía, literalmente, arrancarlo del suelo.
“Lamentamos profundamente cualquier confusión generada y reiteramos que Jorba no apoya ni ejecuta acciones que atenten contra la preservación de árboles históricos, ni del entorno natural que compartimos”, completaron.