La ola de incendios que está asolando el noroeste de España desde hace dos semanas sigue en marcha, aunque el tiempo parecía dar un respiro a los servicios de extinción en la madrugada de este miércoles, cuando bajó la temperatura luego de una terrible ola de calor.
Según los datos del sistema de satélites Copernicus de la Comisión Europea, en lo que va de año ya se han quemado 391.581 hectáreas, de las cuales cerca de 350.000 ardieron desde el pasado 7 de agosto.
El miércoles se contabilizaban 22 focos de nivel dos, el máximo nivel de riesgo, que continuaban activos. Uno de los más preocupantes es en Jarilla, uno de cuyos frentes amenaza el valle del Jerte tras quemar 16.000 hectáreas y otro frente entró en Salamanca.
En Castilla y León, el frente de Porto (Zamora) amenaza el paraje natural del lago de Sanabria y ha obligado a evacuar varias poblaciones. En Galicia, el incendio de Larouco (Ourense) amenaza áreas protegidas de la sierra de O Courel tras arrasar más de 20.000 hectáreas, cerca de un tercio de las 67.000 que han ardido ya en la provincia.
El consejero de Presidencia, Interior y Dialogo Social, Abel Bautista, anunciaba temprano que a pesar de la bajada de temperaturas —con 13 grados de madrugada— la noche ha sido “muy complicada” por el viento, lo que ha hecho que vuelva a intensificarse la “voracidad” de los incendios, con llamas muy altas.
Al explicar la situación del incendio en Jarilla (Cáceres), el consejero ha insistido en que se trabaja en dos líneas de defensa en frentes son “totalmente inaccesibles”, por lo que solo pueden actuar los 25 medios aéreos con los que cuenta el dispositivo.
Las cifras de Copernicus
Un total de 391.581 hectáreas han ardido en España en lo que va de año, según estimaciones del Sistema de Información de Incendios Forestales de la Comisión Europea (EFFIS, por sus siglas en inglés) de Copernicus recogidas por Europa Press. La inmensa mayoría de esas hectáreas han sido pasto de las llamas en este mes de agosto.
La cifra de hectáreas quemadas era de 41.903 a 29 de julio. Para el día 7 de agosto ya habían alcanzado las 47.302. Tras ese punto, la superficie quemada se comenzó a disparar hasta alcanzar las 391.581, por lo que en estos últimos 13 días han ardido unas 350.000.
Si se confirman estas estimaciones, el año 2025 podría ser el año con más hectáreas quemadas del siglo XXI, según ha señalado la ONG World Wildlife Forum (WWF) a partir de datos del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO). Para encontrar un año con peores cifras de hectáreas quemadas habría que remontarse a 1994, cuando ardieron 437.602,50 hectáreas.
Colaboración europea
La directora general de Protección Civil, Virginia Barcones, ha dado detalles de los medios enviados a luchar contra los incendios en España desde otros países europeos a través del Mecanismo comunitario de Protección Civil. Son estos:
- – 2 aviones CanadAir italianos, que llegaron el fin de semana a la base de Matacán, en Salamanca, y deberían terminar esta tarde su labor, pero se está gestionando una nueva prórroga.
- – 2 helicópteros Chinook de Países Bajos que están actuando en León.
- – 1 helicóptero Blac Hawk de la República Checa operando desde Matacán (Salamanca).
- – 1 helicóptero Black Hawk de Eslovenia, también actuando desde Salamanca.
- – 60 bomberos alemanes con 23 vehículos desplegados en el incendio de Jarilla (Cáceres).
- – 66 bomberos franceses con 23 vehículos operando en León junto con la UME.
- – 26 bomberos finlandeses (sin vehículos) integrados en los equipos de extinción en Ourense.
En León
El incendio forestal de Yeres (León), que afectó al espacio natural de Las Médulas, catalogado por la Unesco como Patrimonio de la Humanidad, ha bajado a nivel 1 de gravedad, tras desaparecer las condiciones que mantenían la emergencia en nivel 2, según la Consejería castellanoleonesa de Medio Ambiente.
La evolución favorable de este fuego, unida a la también favorable del de Llamas de Cabrera, que tiene el 90% de su perímetro estabilizado, ha permitido que vecinos de una veintena de localidades evacuadas el fin de semana, entre ellas Bouzas, Manzanedo de Valdueza y San Cristóbal de Valdueza, hayan podido regresar a sus viviendas.
Cortes de tráfico y trenes
Pese a la mejora, continúan las restricciones de tráfico en varias carreteras. La N-164 sigue cortada entre los kilómetros 15 y 21, entre Yebra y Llamas de Cabrera. En la LE-4212 se mantiene el cierre entre los puntos kilométricos 12,5 y 21, entre Cariseda y Chano, y en la LE-5228 entre los kilómetros 5,6 y 15, en el tramo de Salas de Barrios a Bouzas. (EFE)
El ministro de Transportes, Óscar Puente, informó en su cuenta de X de que “todo parece indicar” que el servicio de trenes de alta velocidad entre Madrid y Galicia se podrá reanudar finalmente este miércoles sobre las cinco de la tarde, después de recibir autorización por parte de los Centros de Coordinación de Emergencias de Zamora y Galicia. El servicio lleva suspendido desde el pasado jueves.
También se dan las condiciones para reanudar la circulación del resto de trenes de línea convencional y ancho métrico en la provincia de León “en cuanto terminen las revisiones de la infraestructura”, afirma Puente.
La cuestión del humo
El humo mata más que el fuego. Y se propaga mucho más rápido. Según datos oficiales recogidos por la Universidad de Stanford, hasta un 70% de las muertes relacionadas con incendios son por asfixia y no por quemaduras.
Estas muertes se producen cuando la víctima está muy cerca del incendio, y el humo es tan denso que no puede respirar, debido a la gran concentración de dióxido de carbono y la ausencia de oxígeno.
Cuando el humo se diluye en la atmosfera, deja de preocupar este componente, pues pierde su capacidad de matar por asfixia. El peligro está entonces en las llamadas PM2,5, partículas muy finas que pueden entrar en los pulmones, y el CO (monóxido de carbono, que es tóxico).
En los últimos días, en España, se registraron focos de 42 incendios y el humo se ha extendido por amplias zonas del país. Son muchos los que han sacado de los cajones las mascarillas o se han encerrado en casa.
“El humo de los incendios forestales contiene contaminantes peligrosos”, explica Anna Alari, investigadora en epidemiología de ISGlobal. Está compuesto por ceniza y hollín, puede contener trazas de metales tóxicos como el arsénico, el plomo o el mercurio. Junto con el humo, se expulsan una serie de gases como el dióxido de azufre, que son irritantes para las vías respiratorias.
Algunas de estas partículas son tan finas que pueden ser respiradas. Pasan primero a nuestros pulmones y de ahí a nuestro torrente sanguíneo. Distintos estudios las han relacionado con un aumento de la mortalidad y la morbilidad incluso tiempo después de ser inhaladas.
El equipo de Alari publicó la semana pasada un estudio en The Lancet Planetary Health, asegurando que la mortalidad asociada al humo de los incendios forestales podría estar subestimada en un 93 %. El estudio se basó en datos del proyecto EARLY-ADAPT, que incluye registros diarios de mortalidad en 32 países europeos, con una población total de 541 millones de personas.
Detenido
La Policía local de Arganda del Rey detuvo al presunto autor de los tres fuegos simultáneos declarados en la víspera en el municipio, que dieron lugar a sendos conatos de incendio que fueron sofocados rápidamente.
En concreto, se registraron en la Dehesa del Carrascal, el barrio de parque Europa y La Perlita, según destaca el Consistorio en una nota. El alcalde de la localidad, Alberto Escribano, sostiene que, si se confirma la autoría del detenido, “debe caer sobre él todo el peso de la ley” porque “no hay derecho” a que una persona actúe con esa intención.
Además, desde el Consistorio subrayan que agentes de Policía local, Guardia Civil, Protección Civil y agentes forestales extremarán la vigilancia durante las próximas horas ante la posibilidad de que el detenido no haya actuado en solitario. También piden a los vecinos que alerten a las autoridades policiales si tienen “cualquier pista que pudiera ayudar a la investigación” o, en general, si ven que algún ciudadano inicia algún fuego en verano. (Efe)
Alivio
El fin de la ola de calor ha atenuado la voracidad de los incendios que llevan más de una semana arrasando aldeas y parajes de gran valor natural en el noroeste de España, pero nadie se atreve a vaticinar cuándo se controlarán y apagarán las llamas.
El alivio del calor ha mitigado su avance y la amenaza a núcleos habitados, pero se trata de fuegos de gran magnitud y comportamiento impredecible que siguen a merced del viento y de la sequedad del terreno.
Entre los miembros de los equipos de extinción reina la cautela. “Puede que no surjan nuevos focos, pero con la envergadura que han tomado, esto solo lo para la lluvia”, advierte Xoan Lois Cabreira, bombero forestal de una de las brigadas de la Xunta que acumula jornadas extenuantes en Ourense. “Como no llueva pronto… Son incendios que han cogido vida propia”, apunta un experto agente forestal gallego sobre unos pronósticos meteorológicos que no prevén precipitaciones a corto plazo.