El juicio por el caso de Solange Musse arranca este lunes 1 de septiembre en la Cámara Criminal y Correccional de 1ª Nominación de Río Cuarto. Los acusados son el médico Eduardo Andrada y la asistente social Analía Morales, integrantes del Comité de Emergencia de Huinca Renancó en plena pandemia, imputados por abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público.
La causa se remonta a agosto del 2020. Solange estaba en su casa de Alta Gracia, bajo internación domiciliaria, atravesando la etapa final de un cáncer. Su papá, Pablo Musse, vaiajaba desde Plottier, Neuquén, para verla y acompañarla en sus últimos días pero las autoridades le denegaron su entrada. Fue allí cuando lo obligaron a regresar a Neuquén desde Córdoba. Solange murió poco después sin poder despedirse de su padre.
En diálogo con Fuerte y Claro de Canal 10, Pablo detalló aquel momento que marcó su vida para siempre, y que hasta el día de hoy, lo inunda de dolor: “Perdés el sentido de la vida, los proyectos, todo. Una parte de mi vida y mi corazón se fue con ella”. También señaló que la familia había presentado toda la documentación y los permisos requeridos por el COE: “Nosotros teníamos todo lo que correspondía. Había enviado mail al COE central y al de Alta Gracia, estaba todo documentado, con quién viajaba, por cuales rutas y todo”.
La fiscalía sostiene que los acusados ignoraron la normativa que preveía situaciones impostergables, la obligación de escoltar al viajero hasta el domicilio de la persona en estado crítico. Para Musse, la responsabilidad no termina en los dos funcionarios que desde hoy serán juzgados: “A esto lo esperamos durante cinco años. Tengo la esperanza de que se haga justicia y lo vamos a lograr, no solamente con estos dos imputados, sino con los funcionarios de más arriba”.
En ese sentido, el papá de Solange apuntó a las autoridades provinciales de aquel momento, entre ellas al entonces gobernador Juan Schiaretti y a miembros del COE central como Juan Ledesma y Claudio Vignetta. “Habernos hecho regresar a Neuquén no fue una decisión de Andrada solo. Nos tuvieron cuatro horas esperando. Lamentablemente cuatro personas fueron imputadas y sobreseyeron a dos”, remarcó.
Po último, Musse se quebró al recordar a su hija y el incumplimiento de una promesa que duele hasta el día de hoy: “Yo siempre le dije a Solange que la amaba y que iba a estar con ella. No pude despedirme y no pude cumplir mi palabra”.