El recuerdo positivo de Di María ante Boca: gol en el Mundial de Clubes
A una carrera plagada de momentos dorados, Ángel Di María sueña con agregarle otro capitulo mágico en el Gigante de Arroyito. Insaciable, el campeón del mundo, que viene hacer un golazo de tiro libre para que Rosario Central le gane el clásico a Newell´s, ahora quiere amargar a un Boca que viene de racha el domingo. Y tenerlo en frente, ya demostró hace muy poco, le sienta bien.
Aún no pasaron ni tres meses de la última vez que el Fideo le apagó la esperanza al equipo de Miguel Ángel Russo de ganarle al Benfica en el debut del Mundial de Clubes e ilusionarse con la clasificación, que ya volverá a cruzarlo. Claro, el contexto es bien distinto: ahora es en su casa, con su gente y la camiseta del club de sus amores para cerrar un ciclo.
Pero el rival es el mismo. El mismo al que marcó de penal para dejar a las Águilas a tiro del empate que luego llegó, y el mismo al ya le había frustrado el triunfo en la vuelta de Jan Román Riquelme en 2007.
Aquella jornada en Miami lo tuvo como protagonista en todo sentido. Primero, porque desde el primer minuto sufrió las patadas, embestidas y el juego brusco del Boca de Russo. Segundo, ya que pese a no sentirse libre para despegar su mejor versión pudo llegar al gol. Y por último, lo extrafutbolístico: un festejo que se tergiversó y generó revuelo, y el aplauso de los hinchas de Boca que lo conmovió.
A los 44 minutos, Fideo buscó con un tiro de esquina cerrado desde la derecha a Nicolás Otamendi, quien no llegó a desviar la pelota porque se desplomó en el área grande azul y oro tras sentir un rodillazo en la espalda por parte de Carlos Palacios. Todas las Águilas reclamaron infracción y el árbitro mexicano César Ramos, tras revisar rápidamente la jugada en el VAR, no dudó en cobrar la pena máxima.
Con el talento y la frialdad que caracteriza a un campeón del mundo, Di María definió con sutileza al palo derecho de un Agustín Marchesín que se había revolcado al otro costado y le dio vida a su equipo (1-2), groggy en ese tramo del encuentro después de los dos goles seguidos del Xeneize.
El Fideo se estaba despidiendo del conjunto lusitano pero llamativamente no lo gritó, sino que levantó la mano e hizo su histórico festejo del corazón. Consultado luego sobre si le pidió perdón a los hinchas xeneizes -teoría que recorrió las redes sociales-, respondió sin rodeos: "No, saludé a mi familia que estaba ahí arriba, pero bueno, todo el mundo está diciendo que pedí disculpas".
La entrada El recuerdo positivo de Di María ante Boca: gol en el Mundial de Clubes se publicó primero en Noticias Las Varillas.