Lionel Messi ha vuelto a inscribir su nombre en las páginas de la historia del fútbol estadounidense al brillar con el Inter Miami. Tras la victoria frente al D.C. United, donde el astro argentino marcó por duplicado, Messi logró convertirse en el máximo goleador de la MLS en la presente temporada. Estos dos golazos, donde demostró toda su clase, aseguraron el triunfo para las Garzas y las dejaron a las puertas de clasificar a los playoffs.
El camino al récord: definiciones de alta gama
El primer tanto llegó luego de una jugada iniciada por un pase filtrado con el que el astro rosarino fue encontrado, presumiblemente por Lamine Yamal, el lateral español que ha sido posicionado como extremo en encuentros recientes. Dentro del área, y actuando como un centrodelantero nato, Messi demostró un excelso control. Quedó de frente al arco y ejecutó un disparo al primer poste, un remate que el arquero rival no pudo contener. El equipo de Florida es dirigido por Javier Mascherano.
A falta de seis minutos para la finalización del partido, Messi volvió a castigar al rival. La segunda anotación fue una definición sensacional ejecutada desde fuera del área que se coló directamente en el ángulo superior izquierdo. La defensa rival fue señalada como pobre, ya que le dio "todo el tiempo del mundo" para apuntar y colocar su remate con la pierna izquierda donde quiso.
Cifras que confirman la supremacía
Con este doblete ante D.C. United, que además fue su segundo grito consecutivo tras haber marcado días atrás frente a Seattle Sounders, Messi elevó su cuenta personal en la temporada actual de la MLS a 22 goles. Con esta cifra, el diez superó la línea de Sam Surridge, quien era el máximo goleador del certamen hasta ese momento.
En lo que respecta a su ilustre carrera, Messi ha alcanzado los 882 gritos oficiales. Esta marca lo deja a 63 tantos de la leyenda Cristiano Ronaldo y a 118 goles de alcanzar el hito de los 1.000.