Como ocurre casi todos los fines de semana en Córdoba, efectivos policiales y personal de Fiscalización y Control de Espectáculos Públicos de la Municipalidad clausuraron este sábado por la madrugada dos fiestas clandestinas, una en la capital y otra en la vecina localidad de Saldán.
Entre ambos eventos se calcula que la presencia fue de algo más de 300 personas.
Uno de los procedimientos se efectuó en una casa particular del barrio Cerro de las Rosas, en la calle Tristán Malbrán al 4.200, donde el personal interviniente calculó 150 los asistentes al evento.
El otro hecho tuvo lugar en calle Sarmiento al 400, de Saldán, el cual tenía la particularidad de que para el ingreso se exigía el cobro de una entrada, por lo que se labró un acta con la infracción correspondiente y se secuestraron los equipos de audio.
En este segundo hecho ocurrió que, al producirse la desconcentración del lugar, algunos de los participantes arrojaron piedras contra el personal policial, lo que ocasionó a un efectivo una herida cortante en una de sus manos.
Según la Policía, allí se hizo uso de armamento menos letal y se restableció el orden.
