Se registró en la madrugada del domingo un motín carcelario que, junto con los disturbios posteriores, dejó un saldo mínimo de 31 personas muertas y decenas de heridos.
Según el organismo estatal Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de la Libertad (SNAI), al menos 27 reclusos murieron por asfixia durante la tarde del domingo, tras una revuelta que había comenzado horas antes con al menos cuatro muertos y más de cuarenta heridos, incluida la presencia de un agente policial entre los lesionados.
Durante la tarde, se reportaron 27 muertos adicionales por asfixia, elevando el saldo total a 31 víctimas.
El motín se habría originado en protesta por una reorganización interna de los presos, como parte de un traslado programado hacia la nueva cárcel de máxima seguridad que construye el gobierno en la región.
El centro penitenciario es escenario recurrente de violencia: en septiembre de 2025, un motín en el mismo penal ya había dejado al menos 31 muertos, lo que evidencia la persistencia de la crisis carcelaria en Ecuador.