En un caso insólito, ocurrido en Joao Pessoa, capital del Estado de Paraíba, nordeste de Brasil, un hombre mayor de edad murió luego de ingresar voluntariamente al sector donde residen los leones en el Parque da Bica de dicha ciudad.
Josenise de Andrade, delegada adjunta de la Comisaría Especializada de Homicidios de João Pessoa, dijo que la muerte de Gerson de Melo Machado, alias Vaqueirinho, fue una “fatalidad”.
El hecho ocurrió el domingo cuando el joven de 19 años invadió el recinto de felinos del Parque Zoobotánico Arruda Câmara (conocido popularmente como Parque da Bica) y terminó muriendo a causa de las heridas del ataque de una leona. Se esperan los informes periciales para la conclusión del caso.
Según Josenise, informaciones policiales extraoficiales señalaron que Vaqueirinho era conocido por antecedentes de delitos como daños y hurto y otros actos cuando era menor de edad.
“Verbalizó la idea de ver al animal más de cerca, lo que coincide con informaciones de policías de que él, más de una vez, y en una publicación de una consejera tutelar, mostraba el deseo de ir a África a cuidar de los leones. En el video, podemos verlo descendiendo por el árbol, y la gente grita, le dice que regrese. Podría haber regresado, pero desciende. Al parecer, no tenía la intención de atentar contra su propia vida, sino de acercarse a los animales. Por el historial que me pasaron, tenía problemas psiquiátricos. No tuvo noción del peligro”, siguió el relato la delegada policial Josenise de Andrade.
La administración del parque comunicó que Vaqueirinho escaló un muro de unos seis metros de manera voluntaria y luego descendió por unas de las palmeras que existen en el sector de los grandes felinos. Las autoridades confirmaron que varias personas intentaron impedir la acción del joven, sin éxito.
“Tras la conclusión de las pericias, se dirán muchas cosas. Pero la cuestión es que no tenía acompañamiento familiar, la madre era esquizofrénica. La policía está limitada, son casos que escapan a nuestra atribución. En principio, ellos me dijeron que están más allá de las exigencias técnicas y normativas, pienso que fue una fatalidad. No fue devorado por la leona. Creo que ella pudo haber actuado por instinto de protección o incluso de juego", agregó la delegada.
El jefe de disciplina del Presidio do Róger, donde la víctima tenía expediente, comentó que la semana pasada había advertido públicamente que Vaqueirinho “necesitaba ayuda”.
Según el director del presidio del Róger, la Justicia determinó que el joven fuera llevado a un Centro de Atención Psicosocial (Caps), de donde habría huido.
La leona que mató a Vaqueirinho no será sacrificada. La dirección del establecimiento afirmó que el animal está en buen estado y sigue en observación y acompañamiento contínuo, ya que pasó por un “nivel elevado de estrés”.
