La Fortaleza Europea, Segundo Obstáculo Mundialista de Argentina
La selección de Austria se ha consolidado como un rival formidable para Argentina en el Mundial 2026, gracias a una destacada campaña en 2025 que la catapultó al torneo ecuménico. Bajo la dirección de Ralf Rangnick, el equipo europeo mostró una impresionante solidez defensiva, ganando ocho partidos, empatando uno y perdiendo el restante, con 22 goles a favor y apenas 4 en contra.
Rangnick, un histórico de la Bundesliga germana, ha implementado un estilo basado en la intensidad y la presión alta, acuñando el concepto de “gegenpressing”. Esta táctica exige correr por todo el campo para recuperar la pelota y ejecutar rápidos contragolpes para explotar los espacios dejados por el rival. La gran dependencia del fútbol alemán es evidente, ya que nueve de los once titulares en el último encuentro de eliminatorias militan en clubes de la Bundesliga germana.
El Cerebro y el Goleador Histórico
El motor de este dinamismo es Marcel Sabitzer, mediocampista del Borussia Dortmund y el "director de orquesta" del equipo. Sabitzer es considerado el cerebro del conjunto y se convirtió en el máximo asistidor de la selección durante la última clasificación, logrando tres pases de gol, con casi todos los ataques pasando por sus pies.
Otro pilar esencial es David Alaba, el defensor central del Real Madrid, que ejerce como capitán y es la voz de mando dentro del vestuario. Aunque las lesiones le impidieron jugar el encuentro decisivo que selló la clasificación, sigue siendo un estandarte en la última línea.
En el frente de ataque, el nombre más resonante es el de Marko Arnautovic, un "9 de área" incombustible que, a sus 36 años, continúa rompiendo redes. Arnautovic, quien actualmente juega en Estrella Roja de Belgrado, anotó ocho goles en la campaña mundialista, incluyendo cuatro tantos en un solo partido contra San Marino. Además de ser el goleador histórico de la selección, con 45 tantos que superaron el récord de Toni Polster, el delantero anunció su retiro internacional tras el Mundial. Tras la clasificación, Arnautovic incluso se permitió pedir, “medio en broma, medio en serio”, un feriado nacional para el pueblo austríaco, argumentando que nadie podía saber cuándo se repetiría la gesta, ya que el país no participaba en la Copa desde Francia 1998.
Austria también cuenta con jóvenes promesas como Nicolas Seiwald, un talentoso carrilero de 24 años del Leipzig, a quien Rangnick calificó como “un jugador extraordinario”.
Al analizar su participación en el Grupo J, que completan Argelia y Jordania, la selección europea tiene buenas posibilidades de avanzar a los dieciseisavos de final como segunda del grupo. El equipo de Rangnick jugará sin presiones, ya que perder contra los campeones del mundo está dentro de la lógica, dejando la obligación de ganar del lado de Argentina. Esta falta de presión podría convertirse en una ventaja para los austríacos.
